lunes, 14 de abril de 2014

¿Más escenarios de aprendizaje significa también más oportunidades de aprendizaje?



Al finalizar la conferencia de Tíscar Lara de la semana pasada, una de las preguntas llamaba la atención sobre la situación en la que quedan aquellas personas que no poseen los dispositivos móviles adecuados para integrarse plenamente en una enseñanza con nuevas tecnologías, sin irnos a países más pobres, quedándonos en nuestro país, ¿todos los universitarios tienen un móvil con acceso a Internet, tablet, etc ?

Si nos fijamos en la biblioteca (trabajo en la Biblioteca de Ciencias de la U.V.) lugar en el que podemos presuponer que las nuevas tecnologías son fundamentales, uno de los servicios que más éxito tienen es el préstamo de portátiles, parece ser que por dos razones fundamentales: los ordenadores que en su mayoría tienen los alumnos son antiguos y pesados, prefieren tomar prestado uno que cargar con él y por otro lado, algunos están intentando reponer el ordenado que no les funciona. Por tanto, la llamada "brecha digital" no solo se da entre países desarrollado y países en vías de desarrollo; ni entre personas de más edad y más jóvenes; en ocasiones también viene propiciada por el poder adquisitivo de los estudiantes de la universidad pública.

Por otro lado, las nuevas tecnologías acercan la cultura a personas que de otra forma no tendrían acceso o lo tendrían más difícil para llegar a ella. Los cursos on-line posibilitan que muchas personas que no podrían asistir a unas clases presenciales aprendan, y no simplemente aprendan, se relacionen con personas con las que de otro modo no tendrían la posibilidad, como nos decía Jesús Salinas en su conferencia, el conocimiento se socializa.

Con los objetos de aprendizaje abierto la cultura es más solidaria (Jesús Salinas) pero, en mi opinión aquí está la paradoja, la brecha digital entorpece que algunas persona accedan al conocimiento. Javier de la Cueva, en un trabajo donde explica las acciones que va a llevar a cabo para apoyar una iniciativa de las mujeres musulmanas hace referencia a este hecho, todas las acciones que se realizan en Internet llegan solo hasta un determinado público, pero él recalca dos hechos que me parecen muy interesantes:

1.      "No debemos subestimar a aquellos actores que solo se dediquen a hacerse eco, los conocidos como "activismo de click, activismo de salón o activismo de sofá", porque mientras a más personas se llegue más son las posibilidades de que la información llegue a individuos dispuestos a llevar a cabo los actos en la calle"

 

2.      Si Internet tiene suficiente repercusión llega a medios de participación pasivos, como la televisión. Y aquí interviene lo que él denomina "ecología de medios", Internet y la televisión / radio se retroalimentan

 

Me parece fundamental crear entornos de aprendizaje flexible donde todos podamos experimentar y compartir experiencias y compartir materiales; pero estoy de acuerdo con Jesús Salinas, el espacio debe ser abierto y creativo pero también evaluado y certificado, si detrás no hay una certificación, una recompensa, es difícil conseguir que las personas participemos.

domingo, 30 de marzo de 2014

¿Ponerle puertas al campo?


Una de las reticencias que se plantean en el debate sobre los MOOC es si estos suponen una nueva forma de aprendizaje o si se trata del uso de nuevos medios comunicativos pero con lógicas, digamos, tradicionales. La cuestión no es intrascendente, puesto que en el caso de encontrarnos en el segundo de los supuestos existe un claro riesgo de desperdiciar (¡una vez más!) una oportunidad para renovar las dinámicas de transmisión y construcción del conocimiento. Utilizando un ejemplo bastante reciente, este segundo supuesto es como si el libro electrónico, un formato capaz de albergar videos, enlaces, etc., se utilizara únicamente como un nuevo estándar de texto, una especie de pdf al que podemos modificar algún parámetro (tamaño y tipo de letra). Es necesario explorar el potencial pedagógico de los MOOC, puesto que este tipo de cursos constituyen una herramienta vital de cara a democratizar la educación superior y permitir crear sinergias con actores que no necesariamente deben estar físicamente en los territorios donde están las instituciones educativas. No obstante, es imprescindible que estos actores sean sujetos activos del proceso formativo. Parafraseando a Nietzsche, no podemos estar pensando en crear solo con seguidores, hacen falta creadores y creadoras. Pero para ello hay que crear las condiciones.
Desde MOOC-Explorer se plantea una tipología que distingue entre cMOOC y xMOOC, los que ahora se habla todos los días: "El cMOOC es conectivista: el organizador (¿podemos realmente hablando profesor?) del "curso" (¿podemos realmente hablar de curso?) desarrolla una estructura cohesiva del material educativo, pero no muestra un camino claro para los participantes, esperando que estos la sigan linealmente". Por su parte, el xMOOC "basado en un modelo de pedagogía instructivista, que es lo que hemos conocido durante siglos: la enseñanza directa por una persona experta (el profesor o profesora) en relación con un currículo (el plan de estudios) y teniendo como meta el aprendizaje de conocimientos específicos". Cada uno los tipos de MOOC tendría, evidentemente, limitaciones y ventajas. Así, aunque los cMOOC serían más difíciles de implantar en áreas como las matemáticas y la física, sus resultados estarían vinculados con un tipo de aprendizaje mucho más sólido que el aprendizaje mecánico de contenidos. En el otro extremo, los xMOOC, facilitan la articulación de cursos realmente masivos, aunque principalmente basados en la adquisición de contenidos.
La cuestión que creo que es fundamental es si los MOOC han de ser vistos, en aras a ser "masivos", como una forma de hacer llegar on line los cursos tradicionales o si, por el contrario, deberíamos repensar el formato y, como se dice en lenguaje alpinista, pensar los MOOC como una "ventana de buen tiempo" que hay que aprovechar para redefinir algunos conceptos y prácticas. Personalmente estoy por esta segunda opción. Y aprovecho esta breve reflexión para compartir una duda: tal vez una cuestión interesante sería pensar la palabra "masivo". Creo que deberíamos alejarnos de la cuestión numérica, cuantitativa, y pensar en términos más cualitativos. Quizá en lugar de en cursos masivos, deberíamos ponderar la posibilidad de cursos diversos: cursos que permitan trayectorias formativas diversas, que no tengan el aula como referencia, sino el inmenso espacio que se abre a través de las pantallas de ordenadores y tabletas, ese aleph borgiano al que no sería deseable ponerle demasiadas puertas.

jueves, 27 de febrero de 2014

El poder de lo abierto: ¿es ya una realidad?




La conferencia del lunes 24 de Joaquín Rodríguez “El poder de lo abierto: la transformación de la educación y de la edición universitaria en la era digital”, aborda un tema fundamental en la educación y la investigación, sobre todo desde la “era Internet”. Ya no es necesario esperar semanas, incluso más tiempo, para consultar los descubrimientos de los compañeros que están investigando los mismos temas de interés. Y tampoco es necesario que una editorial publique un artículo para que esté a disposición de los investigadores.

Es fundamental el ciclo del método científico: refutabilidad y reproducibilidad; para avanzar en el conocimiento científico es imprescindible conocer los avances rápidamente y seguir construyendo el conocimiento a partir de su aceptación o refutación.

Por otra parte, es también imprescindible el reconocimiento del investigador entre sus pares, y aquí es donde entran en juego las revistas científicas tradicionales y la “tiranía”, que mucha veces ejercen, con sus precios y sus condiciones de suscripción (ni siquiera de compra, si la biblioteca se ve obligada a cancelar la suscripción no se queda con ese material al que solo tenía acceso pero no ha comprado).

Las perversiones del sistema, como apuntaba Joaquín Rodríguez, ya han salido a la luz varias veces (él citaba este artículo de TheGuardian: How journals like Nature, Cell and Science are damaging science), también es verdad que los fallos del sistema en evaluación de revista en Open Access también han sido denunciadas (mucho que hablar dio el trabajo de John Bohannon, sobre GoogleScholar).

Las bibliotecas ya llevamos varios años intentando crear, mantener y promocionar los repositorios institucionales (en nuestro caso en la Universitat de València, Roderic), la mayoría de las editoriales permiten que los investigadores que publican en sus revistas dejen una copia (pre-print o post-print) de sus trabajos en un repositorio universitario, muchas veces tras un embargo que entorpece la efectividad de este proceso.

Creo, a título personal, que el avance debe venir desde el autoarchivo en estos repositorios institucionales o en la publicación directamente en editoriales o plataformas de acceso abierto, algunas ya existen, funcionan muy bien, tienen mucho prestigio y dan visibilidad y respetabilidad a los autores que publican en ellas (como PlOS, ArXiv…). Es un abuso, bajo mi punto de vista, que por publicar un artículo en Open Access en una editorial, digamos tradicional, el autor o la institución tengan que pagar cantidades cercanas a 3.000 euros por artículo.

No veo una solución a corto plazo, cuando escucho a un investigador que publica en abierto utilizando las distintas licencias que tiene a su disposición para proteger su trabajo y cuenta su grata experiencia, pienso que muy pronto el monopolio de las editoriales acabará; por el contrario, cuando escucho a otros investigadores hablar de sus descubrimientos como algo que solo se puede ver previo pago y con unas condiciones que compliquen mucho la copia, entiendo su postura, pero también entiendo que por extensión, se complica la difusión del conocimiento y la refutabilidad del método científico.

En este artículo de AntonioLafuente se explican los orígenes del movimiento Open Access y su relación con la filosofía del bien común (o procomún).

Y termino con una anécdota: "Poco después de un largo proceso de investigación y pruebas clínicas en 1955, la primera vacuna para combatir la polio había sido inyectada a 10 millones de personas en todo el mundo -posiblemente el producto farmacéutico más importante de la historia. Cuando le preguntaron al investigador porqué no había obtenido una patente sobre la exitosa vacuna, Jonas Salk respondió: "Sería como patentar el sol". Unas cuantas décadas más tarde, este punto de vista parece irrisoriamente pintoresco" (Dove 2002).

Eva Montilla Navas

viernes, 21 de febrero de 2014

4ª conferencia: Begoña Gros. Retos y tendencias de futuro en la investigación acerca del aprendizaje con tecnologías digitales

La 4ª conferencia del curso se ha centrado en la investigación sobre el uso de las tecnologías en el aprendizaje. 
En primer lugar, Begoña Gros habla del estado de la cuestión de la investigación en el ámbito del uso de las tecnologías en el aprendizaje, arrancando desde una revisión bibliográfica de las críticas a las investigaciones sobre la educación. Cuáles son las preguntas que se formulan en esa investigación, qué metodología de investigación se está utilizando de manera habitual y cuáles son los nuevos métodos que se adoptan para mejorar en esta investigación.

lunes, 17 de febrero de 2014

Una oportunidad para repensar la educación superior



Considero que no es casual que determinadas instituciones educativas de elite, como el propio MIT, fueran las primeras en implantar e involucrarse en actividades relacionadas con los MOOC y, en general, con los OpenCourse Ware. Estas instituciones mantienen una tensión constante por adaptar y mejorar sus estrategias formativas, entre otros motivos porque son privadas y pugnan por captar estudiantes/clientes. Pero más allá del debate entre lo público y lo privado en la educación superior, el impulso inicial de estas universidades y centros de investigación ha proyectado con fuerza la imagen de los MOOC como herramientas formativas con futuro. Las universidades e instituciones más modestas  se encuentran actualmente en pleno proceso de implantación de nuevos MOOC. No obstante, la duda que me gustaría plantear en este post es en qué medida estamos aprovechando este nuevo escenario para reflexionar, más allá de los MOOC, sobre la educación superior. Me apresuro a decir que solamente plantearé la duda, pero en absoluto podré ofrecer una respuesta.


Hace unos meses el MIT FacultyNewsletter, en una reflexión sobre los MOOC planteaba que: Many are getting on board, while others remain skeptical, but one happy consequence is unquestionable: we discuss how we teach more now than ever before. Me parece muy provechoso este punto de vista: más allá de la postura que cada cual tomemos respecto a los nuevos entornos formativos, una consecuencia positiva se derivaría del hecho de repensar la educación superior en su conjunto y, por extensión, cómo insertar y qué papel deberían jugar los MOOC en ella. Pero me temo que esta reflexión sobre el conjunto de la educación superior no se está dando en la medida que sería deseable.



Algunos datos sobre finalización de los MOOC




Como decía antes, la importancia cualitativa de las instituciones pioneras en el uso de los MOOC, ha llevado a que el tema tome entidad por sí mismo, dándole una proyección que en ocasiones se superpone al debate general sobre la educación superior. Las instituciones que se han sumado más recientemente a la implantación de MOOC, da la impresión de que se han saltado un escalón y directamente han pasado a debatir el cómo, dejando a un lado las cuestiones que considero esenciales: para quién y para qué. Responder de forma adecuada a interrogantes es vital para garantizar que la educación superior sigue cumpliendo uno de sus roles fundamentales: mejorar las condiciones de vida de las sociedades, en especial mediante el acceso de amplias capas de la población a la educación universitaria.


 En el caso español, además la implantación y desarrollo de los MOOC ha coincidido con el llamado proceso de Bolonia, mediante el cual se pretende articular el espacio europeo de educación superior. Esta coyuntura ha precipitado importantes cambios en el diseño y la gestión de la enseñanza universitaria en un corto espacio de tiempo. El proceso de Bolonia tiene en su “background” palabras clave como “aprendizaje para toda la vida”, “activación”, etc. Entre las cuestiones que plantea Bolonia, las metodologías educativas ocupan un papel central: en Bolonia el referente mítico en la enseñanza se va desplazando de la conferencia magistral hacia metodologías de tipo más constructivista. En este desplazamiento, el aula pierde su estatus de único espacio formativo. Pero Bolonia no da respuesta a cuestiones más de fondo y, sobre todo, su rápida implantación (que se ha dado, además, en un contexto de crisis económica y recortes presupuestarios) no ha permitido repensar la educación superior y, por lo que aquí nos ocupa, cuál es el lugar de los MOOC: ¿son complementarios a las aulas? ¿qué valor tienen como credenciales? ¿han de tomar el modelo del aula (valga la expresión) como referencia o podemos pensarlos desde otras lógicas pedagógicas?


Como decía al principio, no pretendo elaborar una respuesta, sino señalar que, a mi modo de ver, el debate sobre los MOOC debería insertarse en el debate sobre la educación superior y, especialmente, en la reflexión sobre la relación de esta con la mejora de las sociedades. Os dejo aquí un video que me parece, como decimos en valenciano, “engrescador” (engrescar sería como incitar o animar). Se trata de un video que muestra una experiencia (que es una de las que se encuentran en la infografía que tenéis más arriba) que, creo, suscita algunas dudas que pueden ser útiles para el debate.


jueves, 6 de febrero de 2014

3ª conferencia: Jordi Adell.”Los límites de la educación superior en los entornos formal e informal”

El lunes tuvo lugar la 3ª conferencia del curso a cargo de Jordi Adell, de la Universitat Jaume I de Castelló.

Con el título Los límites de la educación superior en los entornos formal e informal, en la conferencia se habló sobre tres temas fundamentales: el contexto político y económico de la educación superior; el caso de los MOOC, como ejemplo de lugar en el que la educación formal e informal convergen y el aprendizaje formal en los límites de la academia, entendiendo esos límites como alternativas al aprendizaje.

Ahora es nuestro turno de escribir sobre los comenarios o reflexiones tras la conferencia de Jordi Adell expuso en su conferencia, que ya comentó Eva en el post anterior.



jueves, 30 de enero de 2014

#esenredUV grupo9: Nos ponemos en marcha

En este punto empieza la andadura del grupo de trabajo 9 del curso online abierto Educación Superior en Red de la Universidad de Valencia #esenredUV

A través del blog iremos volcando nuestros comentarios, compartiendo artículos, enlaces, y de paso completando nuestra tarea final.